-Bueno, entonces ¿¿cogemos el coche?? -dijo agitada- mañana nos vamos a Moscú, quiero ir a ver ese castillo de colores, ¡¡¡es tan bonito!!! ¡¡¡tan ideal!!! ¡¡parece de juguete!! -¡Que idea tan fantástica! -dijo él mirándola con ojos divertidos- Salimos mañana mismo, prepara tus cosas y nos vamos al castillo en donde los sueños se hacen realidad.
-¡¡Sííí!! -gritó ella entusiasmada- No pensé que estarías de acuerdo, siempre quieres ir a Grecia, todas las vacaciones y bueno... aunque me encanta ir a la isla de color azul, Moscú me parece como de ensueño. ¿¿Y si vemos a Anastasia?? -dijo con voz soñadora y ojos brillantes.
-Ja, ja, ja, no creo que veamos a Anastasia pero....
- NO, tengo una idea mejor, ¡¡¡vamos a PARÍS!!! -entusiasmada empezó a pegar saltitos de emoción- ¿No sería fantástico? Además Anastasia estuvo también allí, quizá este visitando a su abuela!!!
-Entonces, que no se hable más, nos vamos a París.
y con esas ultimas palabras sentenció cual sería su viaje, esta vez ella fue quien lo decidió.
No exageres con los puntos interrogativos y exclamativos. Con uno a cada lado vale.
ReplyDeleteYo preferiría Praga.